Noche oscura para la República la del 27 de octubre de 2005. Zyed, Bouna y Muhittin intentan escapar de un control policial en Clichy-sous-Bois, en Seine-Saint-Denis. Los tres jóvenes se refugian en un transformador eléctrico. Este escondite resultará mortal para los dos primeros adolescentes, de 17 y 15 años. El tercero está gravemente herido. En el proceso, la ciudad experimentó disturbios que se extendieron como la pólvora más allá de la región parisina. Más de 500 municipios están afectados.
La represión era generalizada pero, en ese momento, la derecha todavía sabía cómo mostrar comprensión. El 6 de noviembre, tras una reunión del Consejo de Seguridad Interior, el Presidente Jacques Chirac se mostró marcial en las escaleras del Elíseo: “La República está (…) decidida (…) a ser más fuerte que aquellos que quieren sembrar violencia. » Sin embargo, la dimensión social no está ausente.
El 11 de noviembre, el Jefe de Estado pronunció un discurso solemne. “Estos acontecimientos reflejan un profundo malestar”, explica, viendo en…












