Lo que iba a ser una temporada de redención para la estrella del Barcelona Ansu Fati, cedido en el AS Mónaco, de repente ha dado un giro extraño.
Después de un buen comienzo con el equipo de la Ligue 1, marcando seis goles en cinco partidos, el La Masía El prodigio atacante parecía haber redescubierto tanto su confianza como su agudeza. Pero un cambio de entrenador ha alterado por completo su trayectoria.
Crece la preocupación en el Barcelona
De hecho, parece haber signos de fricción entre Ansu y el nuevo entrenador del Mónaco, Sebastien Pocognoli, quien reemplazó recientemente a Adi Hutter.
La situación ha generado preocupación en Barcelona, en el entorno de Ansu e incluso dentro de Mónaco, informa SPORT, y todas las partes esperan que las cosas puedan arreglarse después de su prometedor resurgimiento a principios de temporada.
El ex entrenador Hutter había convencido personalmente a Ansu para que se uniera al club y había trazado un plan paso a paso en colaboración con el cuerpo médico del Mónaco para ayudar al cedido del Barcelona a revivir su carrera.
Las cosas empezaban a encajar para el joven de 23 años con Hutter, que parecía estar en forma, confiado y decidido nuevamente.
Las cosas cambian con Pocognoli
Sin embargo, Hutter fue despedido repentinamente, la decisión sorprendió a los jugadores y fue reemplazado por Pocognoli.
El técnico de 38 años no estaba del todo convencido de Ansu desde el principio e incluso puso en duda públicamente su llegada, diciendo:
“Lo único que sé es que, cuando está en forma, tiene la capacidad de cambiar de juego. Quiero verlo jugar 30 partidos consecutivos antes de sacar conclusiones”.
La relación entre ambos supuestamente se rompió durante el partido contra Toulouse, cuando Pocognoli sustituyó a Ansu con el partido aún abierto. El delantero se mostró visiblemente frustrado y mostró su disgusto al abandonar el terreno de juego, reacción que no sentó nada bien al técnico.
Desde entonces, Ansu ha quedado fuera de la plantilla o en el banquillo, y su ausencia en la última convocatoria de la Liga de Campeones sólo profundizó las dudas sobre un conflicto interno.
Oficialmente, el Mónaco sostiene que la ausencia de Ansu se debe a una enfermedad, pero la sensación general es que hay más.
El Barcelona esperaba que el Mónaco activara su opción de compra de 11 millones de euros el próximo año, lo que ahora parece cada vez más incierto, lo que genera preocupaciones en el club.












